HOSTELVENDING.com 01/09/2016.- Aunque el vending no ha crecido tecnológicamente tanto como otros sectores, las máquinas actuales no tienen nada que ver con las de hace una década.
Nada más que en la evolución que han experimentado los sistemas mecánicos que hay en su interior, los módulos de refrigeración o calentamiento, incluso los materiales empleados en el exterior, la diferencia se nota.
Primero avanzaron gracias a los sistemas de pago y telemetría, hoy además se suman pantallas táctiles, interfaces amigables, software para el control de stock, para el cambio de los precios, para la confección de ofertas personalizadas, para la conexión wifi, para la interconexión de los equipos…
La transformación nos permite hablar de un vending inteligente que, aunque todavía no lo encontramos a gran escala, está ahí esperando que el operador tenga la capacidad de implementarlo y la confianza en que son opciones que aumentan la rentabilidad.
Y lo cierto es que lo hacen. Ya nadie duda de que aceptar pagos con billetes, incluso con tarjetas, aumenta la recaudación media de cualquier máquina. Con los pagos a través de móviles o con la inclusión de sugerencias de producto en las selecciones del consumidor, sucede y sucederá lo mismo.
Las técnicas de venta que podemos ver en cualquier otro espacio ya se pueden aplicar a un canal que hace unos años era tan simple como meter una moneda y elegir un producto. Hoy son auténticos puntos de venta automáticos capaces de aportar un valor añadido al cliente, prestar un servicio más atento, más amable, más amigable y eso se nota en la recaudación a final de mes.
Siempre hemos intentado acercaros todos estos cambios para entender mejor hacia dónde se dirige el canal y dónde hay que fortalecer el negocio para no quedarnos en la cola de la evolución.